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Aguiar   Alcáçovas   Viana do Alentejo Geral

FECHA
1777-1848

FOTOGRAFÍA
Busto do Pe. Luís António da Cruz
Joaquim Filipe Bacalas - 2017

TEXTO
Fátima Farrica - 2015

Luís António da Cruz (Padre)



Importante benefactor del pueblo, rector de la Matriz, de su nombre completo Luís José António da Cruz, era el hijo menor de José Antonio de la Cruz y de D. Maria Francisca. Nieto paterno de João da Cruz Loureiro y de Joana Maria, y nieto materno de André Lopes Ruivo y de Margarida Martins, todos nascidos en Viana. Fue bautizado en la misma localidad, el 30 de abril de 1777, siendo su padrino el juez de fuera Luís José Aleixo Pais. Murió en este pueblo el 26 de septiembre de 1848, a los 71 años de edad.
Habiendo hecho sus estudios en Évora, en particular las clases de Teología del Colegio del Espíritu Santo con el fin de llegar al estado sacerdotal, en 1797 le dieron sus padres la dote, para que tomase órdenes de subdiácono. Inicialmente, los bienes donados consistieron en una zona de pastoreo con olivos en el sitio de Bismo, áreas protegidas donde no se podía cazar de Viana, de las cuales asumió el cargo el 12 de julio de ese año. Sin embargo, cuestiones legales impidieron la posibilidad de obtener esos bienes, lo que determinó una nueva donación de sus padres, el 27 de octubre. Esta vez se le donó una zona de pastoreo y un olivar en Malfor y una zona de pastoreo y olivar en el sitio del Poço Concelho.
El hecho de que sabemos que su padre fue empleado del ayuntamiento de Viana y Familiar del Santo Oficio (Inquisición), permite suponer que nació dentro de una familia con protagonismo social local y algún desahogo económico. Pero esta condición financiera favorable incluso se atestigua en su proceso de calificación para tomar órdenes, donde algunas de sus hermanas afirmaron que su padre tenía muchos bienes más allá de aquellos con que dotaba Luís António.
De hecho, todo el agregado familiar estaba compuesta por el padre, la madre y, de que hay referencia, por otros cinco hermanos mayores: un niño llamado Francisco António da Cruz, que también fue sacerdote, pero que en el año de 1791 había ya fallecido; y cuatro niñas cuyos nombres, de la más vieja a más joven, eran Joana Maria da Esperança, Josefa Joaquina, Maria Francisca Antónia y Teresa Luísa de Santa Ana. En 1798 eran todas solteras y con edades comprendidas entre los 25 y los 34 años. Luís António tenía, entonces, 21 años. A pesar de la aparente comodidad económica de la familia, suponemos que intentar sostener tantas mujeres no sería tarea sencilla. Hay que tener en cuenta que vivían en una época en que las mujeres de grupos sociales más prominentes no trabajaban y que, para los padrones de la época, tenían ya una edad avanzada para el matrimonio.
A lo largo de la vida habrá heredado de sus padres diversos bienes a que juntó otros, adquiridos por compra. A su respeto, João Manuel Santana de Sousa ha dicho: "Los bienes de manos muertas vendidos por el estado en subasta pública, como bienes nacionales, llegaron a precios bajos. A las subastas venía, en ocasiones, solo una persona interesada, que adquiría las tierras por su base de licitación. Pocos tenían el capital para investir. (...) El caso del Padre Luís António da Cruz es esclarecedor. Hasta 1811 había acumulado 22 granjas (zonas de pastoreo, tiras de tierra, viñedos y olivares) y fue dueño de 3 haciendas". Por ocasión de su muerte, el 26 de Septiembre de 1848, dejó las Haciendas de Monte das Pedras, Marmelos, Famais, Montinho do Palanque, Cega Gatos, Flor da Rosa, Espadaneira, Fevereira y Vinagra, 2 porciones de ingreso sobre la Hacienda de la Cegonha y sobre la Hacienda del Aniel, la Granja do Gafanhão y incluso las huertas de Santo António y da Cancela. A estas se juntaban aún 24 pequeñas y medianas propiedades (zonas de pastoreo, tiras de tierra, viñedos y olivares). Esto significa que en 37 años, entre 1811 y 1848, pasó de propietario de tres haciendas a propietario de nueve, a las cuales también añadió la posesión de dos porciones de ingresos en otras dos haciendas, de una granja, de dos huertas y de más dos propiedades de pequeño o mediano tamaño. Poseía también la casa donde vivía, situada en la antigua calle de los Carreteiros, hoy calle Pe. Luís António da Cruz, cambio toponímico operado después del establecimiento de la República, que tuvo lugar en 1910. Los beneficios de la posesión de todas estas propiedades le permitieron acumular una fortuna que utilizó, junto con los mismos y con bienes de otra naturaleza, para fines benéficos. En su testamento, de 16 de septiembre de 1848, destinó su gran patrimonio a la manutención de una capilla de misa diaria, de un hospicio, de una escuela y de un montepío. Promovió, de este modo, la constitución de lo que fue designado, después de la muerte del testador, por Instituto de Piedad y Beneficencia.
 

REFERENCIAS
FARRICA, Fátima, Farrica, Fátima, "Uma descrição da capela do Santíssimo Sacramento de Viana do Alentejo", Callipole: Revista de Cultura, nº 19, 2011, pp. 267-275.
FARRICA, Fátima, No Espaço e no Tempo: Contributos para a História das Instituições de Viana do Alentejo (Séculos XIV-XIX), Casal de Cambra, Caleidoscópio, 2015.

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