La fuente del Paço abasteció a la población durante siglos, no sabemos exactamente desde cuándo. Era una fuente de buceo o de chapotear: cueva con agua debajo del nivel del suelo donde se sumergían las vasijas para llenar.
Fue transformada a través del tiempo, habiendo recibido posterior cobertura de albañilería, rehecha en 1936, según Túlio Espanca.
Su designación debe provenir del hecho de estar en un lugar de pasaje. Por eso, la grafía correcta debería ser Passo (Paso) y no Paço. Además, este último vocablo se aplica en el sentido de palacio o pazos del municipio, pero el Ayuntamiento que el pueblo tuvo en el pasado estaba lejos de este lugar.
La documentación antigua registró algunos acontecimientos en sus inmediaciones, tales como agresiones o crímenes en el camino para la fuente. En 1654 la mujer de un miembro de la élite local fue agredida por una esclava de otro miembro de la nobleza cuando se dirigía a la fuente. La esclava terminó siendo condenada a un año de exilio fuera del pueblo y periferia, por los jueces locales. En 1738 hubo un homicidio en la callejuela de la fuente.